Paraprofessionals negotiations
The Alliance for Education met last Wednesday and I was planning on attending but it was canceled. The paraprofessionals in the school system were going to ask again for a meeting with their union representatives asking for a pay increase.
Meanwhile, earlier in the day was announced granting the cafeteria workers a raise by bringing them up to the state minimum of $14.25/hour. Can you imagine that the City of Lawrence was not even following the legal Massachusetts minimum wage?
In conversations with Mayor Brian De Peña, he told me of his disappointment over this because the Lawrence Public Schools has more than enough money to pay a decent salary to the individuals who are equally responsible as the teachers for the students’ future.
The paraprofessionals’ union canceled their appearance at the LAE meeting because the administration gave them a date to start the negotiations. They will begin on May 9, from 3:30 to 5:30.
And the fights continue
Not the paraprofessionals but the high school students.
The staff complains that they need more security guards but the answer is always the same: no money for that. When something happens, the few guards available take their time responding or not at all. The one watching the security camera is busy watching something on his telephone instead of the screens.
The problem comes from above, from the superintendent’s office. Of all people, in the system, she should be aware of everything happening because her assistant is Odanis Hernandez and her husband is David Hernandez the one in charge of security at the high school.
What a difference when compared to Haverhill! There was a fight during the lunch period between two female students on a Thursday. One of the girls was immediately kicked out of school and the investigation began. On Friday, the Superintendent of Schools Dr. Margaret Marotta moved her office to the high school to be closer to the problems. How refreshing!
In Lawrence, nobody ever sees the superintendent.
Nada que ver aquí
Probablemente haya oído hablar del hombre negro que disparó e hirió a 23 personas en el metro de Brooklyn, Nueva York, el lunes. Fue un ataque puramente racial contra cualquier persona blanca como declaró en las redes sociales y después de su arresto porque los consideraba “supremacistas blancos”.
Mire la foto de Morgan Freeman que tenemos en la portada de esta edición. Cuanto más seguimos hablando de raza, discriminación, privilegio, etc., más inculcamos esas ideas, particularmente en el cerebro de los niños, y nunca sabemos cómo se malinterpretarán. Dejemos de hablar de eso y dejemos que los niños crezcan y se desarrollen como antes: como iguales.
Es por eso que durante algunas semanas he estado siguiendo lo que sucede en las Escuelas Públicas de Lawrence con respecto a la enseñanza de temas relacionados con el sexo y el adoctrinamiento basado en la raza. Después de hablar por teléfono con la Superintendente Asistente Odanis Hernández explicando lo que estaba buscando, pasaron unos días en silencio y no tuve más remedio que presentar una solicitud bajo la Ley de Libertad de Información (FOIA).
Mi solicitud consistió en cualquier material, libros, gráficos, juguetes, etc. que se utilicen en los grados K-12 en relación con la enseñanza sobre la diferencia de razas. Esto podría estar bajo los nombres de Teoría Crítica de la Raza, Proyecto 1619, o cualquier otro nombre que las Escuelas Públicas de Lawrence puedan usar para enseñar las disparidades raciales históricas en los EE.UU.
Dentro del límite de diez días, escuché desde el santuario interior del departamento escolar y la Sra. Hernández respondió de esta manera:
“Después de la revisión, no tenemos conocimiento de ningún material o plan de estudios que actualmente se esté “utilizando en los grados K-12 en relación con la enseñanza sobre la diferencia en las razas”, ni hay ningún plan de estudios que coincida con los mencionados en la segunda parte de su solicitud.
“Existen múltiples planes de estudio K-12 que incluyen o presentan contenido relacionado con la historia o los estudios sociales que puede interpretarse como relacionado con las ‘disparidades históricas raciales’, que incluyen, entre otros, la esclavitud, la Guerra Civil, figuras de los derechos civiles o similares temas históricos”.
Continuó diciéndome que si deseo refinar o revisar mi solicitud, estará encantada de proporcionarme los registros que correspondan y estén fácilmente disponibles, junto con una estimación del costo. ¡Así que hay registros que ella podría enviarme pero tengo que rogar por ellos! ¡De ninguna manera!
Cuando se trata de enseñar sobre sexo…
Sabemos que están utilizando los siguientes materiales para enseñar sobre sexo desde K-12. Consulte estos sitios en línea: Making Proud Choices, Our Whole Lives y FLASH.
“¡Después de emitir una solicitud de registros públicos, descubrimos que las Escuelas Públicas de Lawrence están enseñando educación sexual EXPLÍCITA que NO es apropiada para la edad y NO es médicamente precisa!” dijo Michael King, director de Community Alliances del Massachusetts Family Institute. Él alienta a todos los padres a EXCLUIR a sus hijos en todos los grados si no están de acuerdo con este plan de estudios.
Informemos al público sobre lo que potencialmente le están haciendo a sus hijos y los padres serán los que lucharán contra el sistema una vez que lo sepan. Solo mire estas dos portadas de libros que se usan para enseñar el abecedario a los niños de jardín de infantes.
La descripción de The GayBCs dice: “Una extravagante cita de juegos se transforma en una alegre celebración de la amistad, el amor y la identidad cuando cuatro jóvenes amigos se declaran, se visten con un guardarropa digno de reyes y reinas, y descubren las maravillas de su imaginación. En The GayBCs, las divertidas ilustraciones y los animados poemas de M. L. Webb se deleitan con la belleza de abrazar el verdadero yo…”
No sabemos si estos libros, u otros similares) se están usando en Lawrence por el silencio sepulcral que emanan, pero ojalá algún padre o empleado nos avisen si ven alguno. Al buscar reseñas de este libro, la gran mayoría fue negativa, y aquí hay solo dos ejemplos.
eugenia karydas
El vocabulario va mucho más allá de las habilidades de los niños menores de 8 años. Dicho esto, los niños no deben estar expuestos a la sexualidad a esta edad. No se trata de anatomía, que tampoco es algo que deba enseñarse con un libro de cartón a esta edad. Por lo general, los niños pequeños aprenden primero la anatomía básica a través de la experiencia de vida y de sus padres. También aprenden sobre las diferencias en las familias y la expresión sexual de la misma manera. A medida que crecen, se puede introducir un formato más estructurado. Estos son temas delicados y las diferencias religiosas y culturales deben tenerse en cuenta. No abogo por la prohibición de libros en las bibliotecas públicas, pero me opongo a que un libro como este esté en la sección de la biblioteca infantil de una escuela.
Kutaya world
Vi este libro hoy por primera vez. Soy padre de tres niños pequeños y si puedo darle a este libro 100 estrellas negativas, lo haría, pero solo puedo darle una estrella. Estoy extremadamente enfadado con este libro. No se trata de enseñar a los niños el abecedario; esto es un claro ataque a nuestros hijos. Enseñarles sobre los homosexuales que juegan con niños y leer los comentarios sobre algunas personas que recomendaban leerlo a sus pequeños, ¡eso es muy triste! Para los verdaderos padres que notan la agenda detrás de este tipo de libros que se lanzan a nuestros hijos, debemos unirnos y hacer algo al respecto. El autor es repugnante y es un pedófilo enfermo. Apoyaré cualquier movimiento que hagan los padres para evitar que este tipo de cosas lleguen a nuestros hijos. Esta es una guerra en la mente de nuestros hijos, debemos luchar para que sean niños.
Negociaciones de paraprofesionales
La Alianza por la Educación se reunió el miércoles pasado y estaba planeando asistir pero fue cancelada. Los paraprofesionales del sistema escolar iban a pedir nuevamente una reunión con sus representantes sindicales para que les den un aumento salarial.
Mientras tanto, más temprano en el día se anunció la concesión de un aumento a los trabajadores de las cafeterías llevándolos al mínimo estatal de $14.25/hora. ¿Se imagina que la Ciudad de Lawrence ni siquiera estaba siguiendo el salario mínimo legal de Massachusetts?
En conversaciones con el Alcalde Brian De Peña, me dijo su decepción por esto porque las Escuelas Públicas de Lawrence tienen dinero más que suficiente para pagar un salario decente a las personas que son igualmente responsables como los maestros por el futuro de los estudiantes.
El sindicato de paraprofesionales canceló su aparición en la reunión de LAE porque la administración les dio una fecha para iniciar las negociaciones 9 de mayo, de 3:30 a 5:30.
Y las peleas siguen
No son los paraprofesionales sino los estudiantes de secundaria.
El personal se queja de que necesitan más guardias de seguridad, pero la respuesta es siempre la misma: no hay dinero para eso. Cuando sucede algo, los pocos guardias disponibles se toman su tiempo para responder o no responden. El que mira la cámara de seguridad está ocupado mirando algo en su teléfono en lugar de las pantallas.
El problema viene de arriba, de la superintendencia. De todas las personas, en el sistema, ella debe estar al tanto de todo lo que sucede porque su asistente es Odanis Hernández y su esposo es David Hernández, el encargado de la seguridad en la escuela secundaria.
¡Qué diferencia en comparación con Haverhill! Hubo una pelea durante la hora del almuerzo entre dos estudiantes un jueves. Una de las niñas fue inmediatamente expulsada de la escuela y comenzó la investigación. El viernes, la Superintendente Escolar, Dra. Margaret Marotta, trasladó su oficina a la escuela secundaria para estar más cerca de los problemas. ¡Qué refrescante!
En Lawrence, nadie ve nunca a la superintendente.
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