Mintiendo bajo juramento
El diario The Eagle-Tribune publicó un artículo titulado “Las declaraciones de Rivera sobre la planificadora contradicen el testimonio jurado” por Keith Eddings con respecto a las deposiciones tomadas por el Alcalde Dan Rivera y Wendy Luzón en el caso de Gilda Durán contra la ciudad. Este artículo es muy recomendable leerlo.
Deja muy claro que Wendy Luzón había sido seleccionada para el trabajo mucho antes de que Gilda Durán fuera despedida. Ella solicitó el puesto de Planificadora de Vecindarios el 2 de enero de 2014, antes de que se abriera porque la Sra. Durán fue despedida al día siguiente el 3 de enero. Luego, el 4 de enero, un artículo del Eagle-Tribune (El Alcalde Rivera hace cinco nombramientos de personal) anunció que la Sra. Luzón había sido nombrada Planificadora de Vecindarios.
Yo tengo la deposición tomada de Wendy Luzón pero evité escribir sobre ello. Algo que falta en el último artículo que aparece en la página 61 de la declaración de la Sra. Luzón es que A & J Demolition Services, una compañía de remoción de amianto propiedad de Wendy y su esposo, Raúl Polanco, realizó algunos trabajos en la nueva casa del alcalde Rivera. Cuando se le preguntó si Rivera alguna vez pagó por el trabajo, Wendy dijo que no sabía si lo había hecho. Después de un poco de presión del abogado, admitió que el alcalde pagó a los trabajadores él mismo. ¿No cree que cabe dentro de lo posible que el trabajo fue hecho por los trabajadores de la ciudad?
Hemos escrito en años anteriores acerca de Rivera abusando de su posición utilizando equipos y materiales de propiedad de la ciudad. Esperaba esto de él porque, como dice el Dr. Phil en su programa de televisión, “La mejor forma de predecir el comportamiento futuro es el comportamiento pasado”.
¿Recuerda a John Pica, el contable sin título que mintió en su currículum? El alcalde lo despidió por haber mentido. La solicitud de empleo claramente señala en la parte inferior que mentir sobre la información proporcionada bajo juramento es razón para “despido inmediato.” Bueno, ¿tenemos un caso aquí de los mismos hechos con diferentes resultados?
Estos descubrimientos han surgido como resultado de dos demandas presentadas por Gilda Durán contra la Ciudad de Lawrence. El de ser despedida nunca llegó a los tribunales; el juez en ese caso se negó a permitir que se llevara a cabo porque ella no tenía un contrato de trabajo. Al ser un empleado “a voluntad”, el alcalde tuvo la opción de terminar su posición.
La otra demanda es sobre persecución política porque el Alcalde Rivera despidió a cualquier empleado contratado por administraciones anteriores, volviendo a los días de Michael Sullivan para colocar a sus compinches incompetentes como Wendy Luzón. El juicio comenzará el 4 de agosto de este año. La lista de testigos de la defensa está llena de conocidos miembros de la comunidad. Después de este artículo, estaré curiosa por ver cuántos estarán dispuestos a mentir bajo juramento para ayudar al alcalde.
Por cierto, el alcalde Rivera está haciendo campaña para su reelección celebrando eventos para recaudar fondos que requieren planificación, sin embargo, no ha creado una sede de campaña. ¿Es ese trabajo realizado por el personal de su ayuntamiento durante las horas de trabajo? De ser así, la Comisión de Etica debía investigar ya que eso es ilegal.
Todos los empleados que contrató “a voluntad” tienen que asegurarse de que sea reelegido o el próximo alcalde tendrá el derecho legal de dejarlos ir basándose de este precedente y que no serán capaces de demandar a la ciudad por haber sido despedidos.
Estoy ansiosa porque todos los secretos salgan.
La Policía de Lawrence
La policía de Lawrence arrestó la semana pasada a un hombre de Methuen que le robó el bolso a una mujer de 80 años que estaba limpiando la tumba de su esposo en el Cementerio de Santa María-Inmaculada Concepción cuando un hombre blanco vino por detrás y lo agarró.
El comunicado de prensa dijo que el hombre huyó a pie, pero ella fue capaz de proporcionar una descripción detallada del sospechoso a los oficiales. Ellos pudieron obtener una foto del culpable gracias a una llamada anónima en una tienda de conveniencia cercana y detuvieron a Christopher Ansara de 32 años de Methuen quien más tarde confesó haber cometido el incidente.
Esa es la diferencia cuando quieren hacer las cosas bien.
El sábado pasado, el hijo de Nazario Esquea fue asaltado y robado por tres adolescentes cerca de la Escuela Lawlor en la vecindad de Lawrence St. Le dieron un paseo por las calles de Lawrence y lo dejaron con una herida de aproximadamente una pulgada en la cabeza. Más tarde él dio una descripción del coche como un Honda gris.
El departamento de policía tiene la tecnología para identificar un auto incluso con esa información limitada; el problema es que un auto de esa marca y color es muy popular y eso lo hace imposible, principalmente porque probablemente podría estar registrado a otra persona. Es un proceso muy lento; por eso no lo practican más a menudo.
Cuando Nazario fue a la comisaría para informar de ello, el oficial le dio un papel escrito a mano que estaba impreso en el lado opuesto con otra cosa. No le dijeron si las computadoras estaban fuera de servicio y esa era la razón de hacerlo así.
¡Cosas como esas se están volviendo tan típicas de la policía de Lawrence! Hace unos días, salía de mi casa a la 1:10 de la tarde y había cuatro carros de policía delante de mi casa. Estaban respondiendo a una llamada de mi vecina de al lado que había llamado porque dos hombres estaban tratando de entrar por la puerta de atrás. Al oír sus gritos y el perro ladrando, huyeron.
Pensaron que no había nadie en casa, aunque le sugerí que podría estar muerta dentro. Entonces, la respuesta fue: “Bueno, la llamada llegó a las 11:30.”
Dar una buena impresión
Nosotros, los latinos, tenemos una reputación de ser alborotosos y ruidosos. Lo hemos oído todo cuando se trata de insultos, maltratos y abusos contra nosotros, pero ¿alguna vez ha pensado que podemos merecer algo de la conducta arrojada a nosotros?
Me pasé la semana pasada en Lawrence General Hospital donde el personal no podría ser más servicial, agradable y trabajador. Probablemente tienen más latinos empleados que no hispanohablantes y la atención es de primera clase. Reflejan los pacientes atendidos que son principalmente latinos. Es un ambiente hogareño.
Pero, siempre hay uno. En la habitación de al lado de la mía, había una mujer de boca ruidosa con una voz resonante – incluso cuando ella hablaba en su teléfono celular. En lugar de presionar el botón de llamada cuando necesitaba algo, se paraba en medio del pasillo gritando obscenidades a los ayudantes. ¡Ella los quería AHORA!
Ella los acusó de no trabajar y ganar un sueldo fácil. Además, se quejó que su cama no había sido cambiada en dos días. Una enfermera le recordó que ella había llegado el día anterior, hacía menos de 24 horas. Me preguntaba si ella cambia su cama en casa con esa frecuencia.
Siguió gritando obscenidades sin tener en cuenta a los pacientes que necesitaban descansar.
Había también un hombre que pidió que le limpiaran el piso de su cuarto. No había nada sucio en su piso. Lo quería porque sí, no esperando que el empleado llegara a su habitación mientras limpiaba los demás. Una vez más, me preguntaba si sus pisos se limpian diariamente en su casa.
Ese comportamiento público es lo que la gente recuerda y es por lo que somos juzgados.
Otro caso de lo mismo con diferentes resultados
Estas dos propiedades están situadas en la calle Haverhill aproximadamente a una cuadra de la otra. La del 175 pertenece a la Concejal Estela Reyes. La otra en el 125 pertenece a Grace Marie y Joyce Tomaselli.
Las Tomasellis han estado tratando de arreglar su casa con el fin de poder mudarse de nuevo en ella, pero la ciudad se lo ha hecho imposible. Pusieron un “fire watch” que acumuló más de $100,000 y las damas están desesperadas porque la van a perder. Un “fire watch” es cuando tienen un bombero estacionado en frente de la casa a toda hora para evitar un incendio. La factura se agrega entonces al dueño de la propiedad.
Mientras tanto, la propiedad de la Concejala Reyes (la que está próxima a la Escuela Oliver que va a ser arreglada o reconstruida a un costo de unos 40 millones de dólares) está en peores condiciones y no le han puesto un “fire watch”.
¿Será que hay un amigo del alcalde interesado en adquirir la casa de las Tomasellis?
