Consecuencias de cometer fraude electoral
Durante el programa de radio del sábado pasado, el tema fue mi artículo reciente sobre una nueva ley en Massachusetts que otorga licencias de conducir para personas indocumentadas y profundicé en el tema de los no ciudadanos de los Estados Unidos registrados para votar. La ciudad de Nueva York ha estado batallando por la posibilidad de otorgar el derecho al voto no solo a los no ciudadanos que puedan estar legalmente en el país, sino también a los indocumentados. La razón es que viven en la ciudad y pagan impuestos, por lo que deberían tener derecho a votar.
En 2020, la Legislatura Massachusetts aprobó que todos los solicitantes de una licencia de conducir también sean registrados automáticamente como votantes a menos que “opten por no participar” al “marcar la casilla” para detener la provisión automática. La Ley que fue aprobada el pasado 15 de febrero ha eliminado la provisión automática de nuevas licencias, a partir del 1 de julio de 2023, y prohibirá que las licencias se utilicen como identificación de votantes en las urnas.
Existe la posibilidad de que muchos de esos titulares de licencias no tuvieran idea de que los trabajadores sociales de la oficina de asistencia social o incluso los funcionarios del Registro de Vehículos Motorizados los registraron como votantes. Pero también existe la posibilidad de que otros se enteraran de que figuraban como votantes en su ciudad o pueblo y decidieran hacer lo que consideraban su deber.
Ya sea que el voto emitido por un no ciudadano se deba a la ignorancia o a una clara intención de hacer trampa, la ley es la misma. La internet está llena de ejemplos de personas que han sido deportadas por haberlo hecho.
Cuando traigo información a través de Rumbo o en la radio, es como resultado de mi investigación y está demostrado lo común que es. Hay un artículo desgarrador sobre la madre soltera de tres niñas deportada hace diez años y no ha visto a dos de sus hijas que se pudieron quedar atrás porque nacieron aquí.
Como dije, algunas personas votan porque ven que otros lo hacen y al estar en la lista de votantes piensan que está bien. Hay otros casos en los que las personas que saben cómo funciona el sistema, van a votar y no se les pide identificación más allá de algo que muestre una dirección.
Quería enumerar algunos artículos sobre casos de deportación que encontré, pero en cambio, lo convertiré en otra pieza educativa para todos. Cualquier persona interesada puede encontrarlos en Google.
Lo que dice la ley
Hay una página de HG Legal Resources Inc sobre Consecuencias para los inmigrantes de cometer fraude electoral que tiene muchos detalles sobre lo que no se debe hacer. He aquí algunos extractos:
“Cuando personas que no poseen ciudadanía en el país participan en eventos de votación, esto podría inclinar los resultados de los candidatos que intentan asumir un cargo. Si bien el sistema de registro para votar posee vulnerabilidades a estas acciones, existen consecuencias estrictas para los inmigrantes que alteran el resultado de las elecciones”.
En ciudades como nuestro Merrimack Valley, “Parte del problema con las elecciones al contar los habitantes de un distrito es que algunas de estas personas no son ciudadanos de los Estados Unidos. Algunos son inmigrantes ilegales y otros son aquellos que tienen residencia legal pero aún no han solicitado la ciudadanía dentro del país. Incluso si ninguno de ellos intenta votar, esto aún afecta el resultado según las estadísticas y los números. La capacidad de las elecciones para enfrentar el fraude electoral es grave cuando la inmigración masiva afecta las áreas específicas donde se llevan a cabo estas elecciones. Es importante saber qué causa estos problemas y cómo las consecuencias pueden desempeñar un papel para determinar si se produce un fraude electoral”.
Acabamos de tener una redistribución de distritos como resultado del aumento de la población y muchos nuevos residentes han terminado en las listas de votantes debido al antiguo sistema de registrarse al momento de solicitar una licencia de conducir.
Estar en la lista de votantes no es ilegal; el problema es si votan, aunque crean que estaban haciendo lo correcto. Se supone que deben conocer la ley o pedirle consejo a alguien. Si no quiere tener problemas en el futuro, asegúrese de eliminar su nombre de las listas. Alguien más podría venir haciéndose pasar por usted (lo cual sucede) y terminará siendo acusado.
Eliminar nombres de la lista ha sido un problema durante mucho tiempo a menos que la persona vaya personalmente a hacerlo. El exsecretario de la ciudad de Lawrence, Bill Maloney, dijo públicamente muchas veces que el Secretario de Estado no le permite limpiar la lista de votantes.
Ha llegado el momento de buscar los nombres de esos votantes “inactivos” y eliminarlos si no han votado en más de dos elecciones consecutivas. Si vienen a votar algún día, hay un sistema para permitir ese voto y se agregará su nombre.
Entre las sanciones que se enfrentan por votar ilegalmente, según HG Legal Resources están: “Aparte de las multas y el posible tiempo tras las rejas de una prisión estatal o federal, el no ciudadano podría enfrentar la deportación. Si él o ella es un inmigrante ilegal, las autoridades pueden capturar al individuo y asegurarse de que sea llevado a su país de origen de inmediato. Si la persona está legalmente en los Estados Unidos, aún puede enfrentar la deportación como sanción por cometer acciones de fraude electoral. Manipular cualquier elección, ya sea a nivel local, municipal, estatal o federal, es un delito, y la persona generalmente enfrentará graves consecuencias. Es ilegal que cualquier persona que no sea ciudadana participe en la votación, y esto podría ajustar negativamente los números para cualquier funcionario electo”.
También ofrecen un último consejo: “Algunas personas enfrentan cargos penales por fraude electoral cuando son inocentes. Es importante contratar a un abogado para proteger los derechos de la persona en estas situaciones. Muchos casos de supuesto fraude electoral son inexactos y la persona no cometió ningún delito.”
Siempre aprendiendo…
Siempre escuchamos que los miembros de la Corte Suprema son nombrados de por vida, pero acabo de enterarme esta semana que pueden ser acusados y removidos. No estoy abogando por iniciar un movimiento para deshacerme de ninguno de ellos, pero es refrescante saber que existe la posibilidad de arreglar las cosas en caso de que se vuelvan rebeldes.
La Constitución establece que los jueces “desempeñarán sus cargos con buena conducta”. Esto significa que los jueces ocupan el cargo por el tiempo que elijan y solo pueden ser destituidos de su cargo por juicio político.
¿Alguna vez un juez ha sido acusado? Quince jueces federales han sido acusados. De esos quince: ocho fueron condenados por el Senado, cuatro fueron absueltos por el Senado y tres renunciaron antes de un resultado en el juicio. El único juez que fue acusado fue el juez asociado Samuel Chase en 1805, acusado de conducta arbitraria y opresiva en los juicios. Después fue hallado inocente por el Senado y sirvió hasta morir en el 1811.
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