Maldonado se contradice
Cuando el concejo municipal vota sobre cualquier tema, he sido muy cuidadosa con cualquier crítica porque los elegimos y los ponemos allí para representarnos y votar su conciencia ya que tienen acceso a información que la mayoría de los residentes no conocen. El hecho de que estemos esperando que votaran de acuerdo a nuestros deseos, no nos da el derecho de ser irrespetuosos o guardarles rencor. Ellos están haciendo su trabajo.
Habiendo aclarado eso, este comentario es con respecto a mi confusión sobre voto del Presidente del Concejo en la Petición de Autonomía para permitir que Eileen Bernal se convierta en jefe de despacho del alcalde. Esa es una de las quejas presentadas por la Fundación para la Transparencia en el Gobierno en sus declaraciones juradas para remover al Alcalde Dan Rivera. He dicho que estoy confundida porque el señor Maldonado está de acuerdo con el movimiento de remover al alcalde, sin embargo, votó a favor de la petición de autonomía.
Si él cree que la contratación de la señora Bernal se ha hecho fuera de lo que la Constitución de la Ciudad permite por lo que se ha convertido en una de las quejas, ¿por qué sancionó las acciones del alcalde votando por la petición?
Le pregunté al presidente del concejo y su respuesta fue que él siente mucho respeto por la ex concejala Bernal y no quería que ella pensara que lo hacía por estar en su contra. ¿Qué? ¿Se dan los votos basado en la ley y el sentido común o en la amistad? Yo siento lo mismo por ella, pero su voto contradecía sus creencias.
Me pregunto cuántas veces sucede así.
Fracaso Comité de Finanzas
En julio, el Alcalde Rivera solicitó un presupuesto adicional de $100.000, que se suponía iba a ser discutido por el Comité de Finanzas. Tenían que reunirse y decidir si se justifican los gastos y traerlo de vuelta al Ayuntamiento para su aprobación. Pasó el tiempo y la ley requiere que estas decisiones sean completadas dentro de 45 días. Como consecuencia de los retrasos, el tiempo expiró y el presupuesto suplementario fue aprobado de forma automática debido a la falta de acción del concejo municipal.
Eso es en pocas palabras lo que ocurrió aunque veo un plan más metódico. Lo primero que pensé cuando me enteré fue que el dinero era para pagar el salario de Theodoro Rosario (el agrónomo interpretando el papel de ingeniero de la ciudad), que fue eliminado por el voto anterior concejo en un esfuerzo por cancelar su empleo, pero el alcalde perseveró. Tal vez, si el Comité de Finanzas aprobaba el presupuesto suplementario, tendría pocas posibilidades de pasar por la aprobación del concejo de la ciudad. Por eso pensé que los retrasos y de vencimiento de los 45 días eran un truco cuidadosamente inventado para evitar el rechazo, mientras que el alcalde se salió con la suya.
Hablé con Kendrys Vásquez, presidente del comité de finanzas y me explicó que los retrasos fueron causados por no poder establecer una fecha de reunión, más tarde complicada por las vacaciones de Marc Laplante. Los otros miembros de este comité son Laplante y Estela Reyes y no puedo entender por qué se hizo tan difícil de programar una breve reunión, tomar una decisión y transmitirla al concejo dentro de los 45 días.
Kendrys sugirió que tal vez el presidente del Concejo Modesto Maldonado fue responsable, en parte, por no conseguir de ellos una respuesta oportuna. No sé cómo el calendario interno de las funciones del concejo municipal pero dudo que el presidente tiene que llevar la cuenta de tantos subcomités en ese junta.
Si como sospecho, se trataba de una burla, fue un insulto perpetrado en todos nosotros. En cambio, si se trataba de un descuido, fue un terrible error y no podemos confiar en ellos.
Decida usted.
