Cuando anuncian una obra de teatro, junto al anuncio publican los precios de los asientos. Siempre la primera fila es la de más alto precio, que son adquiridas, por lo general, por los más pudientes. ¿Vanidad? Tal vez. Lo cierto es que los asistentes a la obra, siempre muestran curiosidad por saber quiénes son los allí sentados porque es la fila desde donde mejor se ve.
Este es nuestro caso. Aunque no se trata de un teatro, fuimos afortunados de tener primera fila desde donde observar el desarrollo del drama que está viviendo en estos momentos la Ciudad de Lawrence, específicamente el sur de la ciudad con el reemplazo de las tuberías de gas que comenzó frente a nuestra casa, donde se encuentran nuestras oficinas, el martes, 25 de septiembre.
Ya es de dominio público, que a raíz de las explosiones de gas ocurridas el jueves, 13 de septiembre 2018, y que envolviera en llamas docenas de viviendas a través del Valle de Merrimack, Columbia Gas anunció que reemplazaría aproximadamente 49 millas de tuberías de gas subterráneas en Andover, North Andover y Lawrence, para lo cual se dieron un plazo de hasta el 19 de noviembre para dar por terminada la obra.
El martes, 25 de septiembre, desde la esquina de la Calle Beacon, con una sierra circular comenzaron a cortar dos líneas paralelas en el asfalto en la Calle Mt. Vernon, en dirección hacia South Broadway. Al día siguiente, miércoles, llegaron con maquinaria pesada y comenzaron a cavar a lo largo de las dos líneas que habían cortado el día anterior, con el objeto de enterrar la nueva tubería.
De esta forma continuaron hasta el sábado 29. Al finalizar el día, habían sobrepasado los tanques de agua que se encuentran en la calle Mt. Vernon, a una distancia de unas dos cuadras más o menos de la esquina de Beacon.
No somos expertos en esta materia, si detallamos lo acontecido no es por criticar sino alabar el trabajo realizado por esta cuadrilla. No sabemos quiénes son ni de dónde vinieron, si es que vinieron de algún lugar. Solo queremos destacar la profesionalidad con que efectuaron su trabajo. Siguieron un plan bien coordinado, por lo que pudimos apreciar. Al final de cada día, limpiaban el área donde habían trabajado dejando el sitio inmaculado.
En nuestra opinión, si la promesa de completar la inmensa tarea que Columbia Gas se ha comprometido a terminar para el 19 de noviembre no se logra, no creemos que será por culpa de esta cuadrilla, que por cuatro días, tuvimos la dicha de observar desde nuestra primera fila, sin costo alguno.