Por Charles Boddy
Puede que usted no conozca la historia de Gene Scanlon, pero debería. Es una historia de amor y sacrificio, sufrimiento silencioso, y la habilidad de nuestra comunidad para sanarse. Es una historia que tomó toda una vida en su creación: 43 años después de la muerte del oficial de policía a los 42 años de edad, su nombre es finalmente introducido en el papel de los agentes de policía de Lawrence muertos en el cumplimiento del deber.
El sábado, 4 de julio ciudadanos, amigos, oficiales de policía, el Alcalde Daniel Rivera, el Jefe de Policía de Lawrence James X. Fitzpatrick, el Jefe de Policía de Methuen Joseph Solomon, los Concejales Roger Twomey y Eileen O’Connor Bernal, y la familia Scanlon se unieron con Guardias de Honor de los departamentos policíacos de Lawrence, Methuen, Andover, North Andover y Salem, NH en la intersección de las calles Davis y Amherst en Lawrence para develar una placa conmemorativa y así conmemorar perpetuamente al patrullero Eugene F. Scanlon, Sr., muerto en acto de servicio el 12 de febrero, 1972. Hoy en día, la placa se encuentra en la calle frente a la casa de su familia, donde su viuda crio a sus cuatro hijos a la edad adulta, manteniéndolo como parte del barrio que tanto amaba.
La corta vida de Eugene F. Scanlon fue una de compromiso con el servicio a los demás en todos los aspectos. A través de su devoción hacia su prójimo, se alistó en dos especialidades militares altamente peligrosas: paracaidista del Ejército y, más tarde, durante la guerra de Corea como un buzo de aguas profundas. Este mismo espíritu comunitario le inspiró para trabajar con niños adoptados, y para servir como un mentor y entrenador en el programa de Pequeñas Ligas de Lawrence. Su naturaleza desinteresada le llevó, en tiempos de paz, a servir a su comunidad como patrullero de la Policía de Lawrence, convirtiéndose primero en oficial de policía de reserva de Lawrence el 14 de marzo de 1965 y más tarde patrullero el 30 de noviembre el 1969.
La dedicación y extraordinario servicio del oficial Scanlon fue reconocido por el entonces Concejal Lawrence Philip C. DiAdamo quien citó su valiente acción para salvar vidas el 23 de abril de 1971, cuando se arrastró a través de un denso humo y llamas para rescatar a una mujer atrapada en un incendio de un apartamento en los altos del 213 de Jackson Street. Él voluntariamente arriesgó su propia vida para salvarla.
El 28 de enero de 1972, de Gene Scanlon estaba programado para pasar la noche en casa con su esposa y tres hijos. Mientras tanto, el patrullero Paul Sutton, estaba programado para trabajar simultáneamente en un baile en la Escuela Superior de Central Catholic y su turno regular de patrulla. Sutton le pidió a su amigo cercano, Scanlon, si podía cubrir la asignación de ese día. El patrullero Scanlon inicialmente se negó, sin embargo su espíritu altruista lo convenció para aceptar el trabajo extra. Fue así que el patrullero Scanlon se encontró proporcionando una presencia policial en el baile de la Escuela Superior de Central Catholic. La escuela era solamente de varones donde asistían estudiantes de alrededor del Valle de Merrimack e invitaron a chicas locales a la danza. Este hecho enfureció a los estudiantes locales.
Aproximadamente a las 11:30 de la noche, surgió un disturbio que requirió que el Oficial Scanlon arrestara a los responsables. Al tratar de completar los arrestos necesarios, el Oficial Scanlon fue atacado por un grupo de hombres jóvenes, y resultó gravemente herido con abrasiones en sus manos y rodillas, una patada en la ingle, y múltiples golpes en la cabeza. El Oficial Scanlon fue inmediatamente transportado a la sala de emergencia, recibió tratamiento para las lesiones sufridas en el ataque y más tarde dado de alta por el hospital para recuperarse en casa. Sin embargo, la gravedad de sus lesiones persistió y fue readmitido en el hospital el 10 de febrero 1972 y expiró el 12 de febrero de 1972. El médico al cargo del cuidado del Oficial Scanlon llegó a la conclusión de que su muerte se debió al ataque el 28 de enero.
En el momento de su muerte, el Oficial Scanlon dejó a su esposa, Jane, sus hijas Susan-Jane y Kathleen Anne, su hijo William y su hijo por nacer, Eugene, Jr. Los efectos duraderos de una muerte prematura y violenta han sido un constante y difícil recordatorio para la viuda del Oficial Scanlon que nunca se volvió a casar. Sus hijos crecieron sin padre.
Los 43 años siguientes han sido de resistencia tras la pérdida sufrida por la familia. Cada reportaje de otro oficial que muere trajo aún más angustia por su pérdida, y el hecho de que su sacrificio se mantuvo, en su mayor parte, sin ser reconocido. Sus dos hijos, uno de ellos ex oficial de policía de Lawrence, y el otro que lleva su mismo nombre, Gene, Jr., quien todavía usa el número de placa de su padre como un miembro de la fuerza, han incluso donado para la creación del monumento en memoria de la Policía de Lawrence en el Cementerio de Bellevue. Ni una vez han pedido el reconocimiento de su padre. No obstante, a la familia siempre le molestaba que el patrullero Scanlon fuese olvidado. El nombramiento de la intersección en el sur de Lawrence, las resoluciones de la Alcaldía y el Concejo Municipal, y la esperanza de que su nombre pronto aparecerá en el monumento en memoria de los policías caídos en el cumplimiento de su deber en Washington han comenzado a sanar las heridas de hace 43 años. Estos detalles también unieron a una comunidad en agradecimiento. ¡Que él ahora descanse en paz!