¿Es su hijo o hija una víctima de Transgenerismo?

¿Es su hijo o hija una víctima de Transgenerismo?

Por Dalia Díaz

 

Después de leer un artículo sobre lo que está haciendo el Instituto Nacional de Salud (NIH) en este país, lo único que me vino a la mente fue el Dr. Josef Mengele, el “ángel de la muerte”, que realizó experimentos médicos inhumanos y, a menudo, mortales en prisioneros en Auschwitz.

El tema de los asuntos transgénero está en las noticias a menudo y no hablo de eso porque no tengo una opinión cuando se trata de adultos. El 8 de diciembre de 2022, mi columna mencionó el sistema que se utiliza en las escuelas públicas de todo el país para instruir a los niños desde temprana edad en temas sexuales.

Se ha sabido que el Children’s Hospital de Boston estaba realizando estas cirugías y cuando lo mencioné hubo algunos que cuestionaron de dónde saco mi información. Simplemente los remití a su página web donde describen todos sus servicios a esa población.

Ahora, para aquellos que dudaron de mi palabra, los referiré a una publicación en The Daily Signal, Republicans Demand Answers From NIH on Transgender Youth ‘Experiments’ Study That Left 2 Dead, Other Sterilized, por Tyler O’Neil, con fecha de mayo 9, 2023.

El artículo dice en parte que los Institutos Nacionales de Salud otorgaron $477,444 en una subvención de cinco años al Hospital Infantil de Boston, la Universidad de California en San Francisco y el Hospital Infantil Lurie de Chicago para el estudio, Funcionamiento Psicosocial en Jóvenes Transgénero después 2 años tomando hormonas. Esto fue publicado por el New England Journal of Medicine publicado en enero.

“El estudio analizó a 315 participantes, identificados como transgénero y no binarios, entre las edades de 12 y 20 años, en el transcurso de dos años. Estos participantes recibieron “hormonas de afirmación de género”, es decir, hormonas para hacer que sus cuerpos masculinos o femeninos se parezcan a los cuerpos del sexo opuesto.

Johanna Olson, del Children’s Hospital de Boston, “llegó a afirmar que los niños pueden conocer su identidad de género desde el útero”, según el artículo. Más tarde, recibió una subvención federal para permitir que niños de hasta 8 años recibieran hormonas del sexo opuesto.

Nunca esperábamos algo así en este país, permitir que los jóvenes sean utilizados en un experimento de este tipo que provocó que dos de ellos se suicidaran y el resto probablemente quedara estéril como resultado. En entrevistas televisivas hemos visto casos de arrepentimiento cuando les han mutilado los senos y los genitales, solo para darse cuenta de que han cometido un gran error. Si son mayores de edad, son responsables de sus acciones, pero exponer a los niños a eso, usarlos para obtener una subvención del gobierno es imperdonable.

Los 15 republicanos de la Cámara y el Senado señalan los dos suicidios y 11 episodios de ideación suicida.

Dijeron en su carta: “A pesar de la abrumadora evidencia de que los niños en transición química no son seguras, los NIH planean dar más de $10.6 millones para experimentar con niños y adolescentes hasta el 2026”, y continuaron: “Estamos profundamente preocupados por el uso de dólares de los contribuyentes para avanzar en experimentos con niños que serán dañados irreversiblemente por la ideología de género radical”.

“El dinero de los contribuyentes no debe usarse para financiar estudios que alienten las intervenciones de transición de género en los jóvenes”, dijo el Senador Ted Budd de Carolina del Norte a The Daily Signal en un comunicado el lunes. “El NIH debe rendir cuentas por usar el dinero de los contribuyentes para estudiar estos experimentos altamente cuestionables”.

Mientras tanto, mi pregunta es si los padres están al tanto de lo que se les enseña a sus hijos en la escuela, qué conversaciones tienen con los maestros y consejeros que pueden ser objetables, y si alguna vez les han dicho que guarden secretos de sus padres.

Los padres no pueden enviar a sus hijos a la escuela con la confianza de que se les enseñará de acuerdo con nuestras creencias; en cambio, sus mentes y cuerpos están siendo envenenados. Puede que no sea una práctica en su ciudad o en la escuela de su hijo, pero debe asegurarse de que no esté sucediendo haciendo preguntas.

Y, ¿dónde están las iglesias en esto?