El domingo, 3 de julio de, 2016, el reportero del Eagle-Tribune Keith Eddings habló de la Concejala Estela Reyes: su conflicto de intereses, posibles violaciones de ética, y el uso de información privilegiada para beneficiarse directamente en la compra de propiedades, entre otras, propiedades de la ciudad.
Desde la publicación de un artículo en Rumbo por la escritora y propietaria Dalia Díaz hace tres o cuatro semanas sobre la venta de propiedades de la Ciudad para la concejala de Estela Reyes, y ahora los artículos Keith Eddings en el Eagle-Tribune muchas preguntas están siendo elaboradas sobre estas transacciones. Por mi parte, como de costumbre, tengo un montón de preguntas y opiniones sobre este asunto.
En la reunión del Comité de Viviendas de 25 de enero, 2016, la Comisión sometió a votación para vender a Junior Rozón el lote en 92 Oak St. por la suma de $3,300. De acuerdo con la minuta de esta reunión, la Concejala Estela Reyes se excusó de la reunión citando una “súbita emergencia familiar”. Quisiera que los lectores examinen lo que realmente sucedió aquí.
El martes, 2 de febrero, el Concejo de la Ciudad votó para vender a Junior Rozón un lote de la ciudad situado en el 92 de Oak St., por la cantidad de $3,300. Al menos para algunos concejales, la venta de este lote era simplemente otra venta de propiedades municipales para vecinos inmediatos interesados. Cabe señalar que el Sr. Rozón vive en Haverhill y no es un vecino contiguo.
El Comité de Viviendas se compone de cuatro miembros: El Presidente Jeovanny Rodríguez, Mark Laplante, Nilka Alvarez-Rodríguez, y Estela Reyes. Dado que la Concejala Nilka Alvarez-Rodríguez ha estado enferma y no estaba presente en la reunión, el Comité necesita tener tres miembros para realizar su función. Con la Concejala Reyes excusándose de la sesión, la Comisión no tendría quórum para continuar y la venta de la propiedad no habría tenido lugar. Pero convenientemente, nuestro Presidente del Concejo Kendrys Vásquez estaba allí para sustituir a la Concejala Estela Reyes y rescatar la situación. ¡Qué conveniente!
Creo que la Concejala Estela Reyes inventó la ” súbita emergencia familiar”. Ella sabía que no podría votar sobre la venta de esta propiedad, ya que beneficiaría a su socio de negocios y a ella directamente causando una violación de ética. Una vez que este asunto sale del comité, en el concejo completo requiere 6 votos y una explicación, (la declaración por parte de la Concejala Reyes), ya que era más conveniente tener el Presidente del Concejo reemplazar a la Concejala Reyes en la reunión y hacer la venta posible. ¿Le huele esto a una conspiración y encubrimiento?
Si huele como una conspiración y encubrimiento es porque “lo es”. Creo que el Presidente del Concejo Vásquez sabía que la venta de la propiedad de la ciudad beneficiaría directamente a la Concejala Estela Reyes. De repente, todos los que participaron en este asunto se están escondiendo debajo de una roca: Abel Vargas afirma que no tenía conocimiento acerca de un proyecto de $45 millones para mejorar la Escuela Oliver. ¿Cómo puede ser esto? ¿Una persona responsable de traer empleos a la ciudad se mantuvo ajena a un proyecto de $45 millones que generaría muchos puestos de trabajo? Yo no lo creo. El Alcalde, Danny Rivera también está diciendo de su ignorancia sobre la venta de esta parcela de la ciudad; “Una oportunidad perdida”. ¿Será posible que el Alcalde mantuviera a su partidaria de más confianza como la Concejala Reyes fuera de onda en la renovación de la Escuela Oliver? No lo creo.
¿Entonces qué tenemos aquí? Tenemos una conspiración para encubrir la venta de una propiedad de la ciudad que nunca debería haber tenido lugar. En primer lugar, la Concejala Estela Reyes debería haber revelado al pleno del ayuntamiento que se beneficiaría directamente de la venta de la parcela de la ciudad.
En segundo lugar, el Presidente del Concejo debería haber revelado a todo el Concejo el interés y el beneficio para la Concejala Reyes. ¿Tenía el Presidente del Concejo conocimiento de primera mano de la situación? Seguro. De lo contrario, ¿por qué iba a estar tan convenientemente presente en el momento justo, y el momento adecuado para sustituir a la Concejala Estela Reyes?
El alcalde no debería haber firmado la venta del lote, porque creo que también tuvo conocimiento de primera mano sobre este asunto.
También creo que el “justiciero” miembro del Comité Marc Laplante tenía conocimiento de primera mano de este asunto y prefirió guardar silencio y no divulgarlo a todo el Concejo.
El miembro del comité que lo preside, Jeovanny Rodríguez me admitió que tenía “algo” de conocimiento del hecho de que la Concejala Estela Reyes se beneficiaría de la venta de este lote a Junior Rozón. ¿”Algo”?
En conclusión, hubo y sigue habiendo una conspiración y encubrimiento por parte del Alcalde, Abel Vargas, el Presidente del Concejo, la Concejala Estela Reyes, y los demás miembros del Comité de Viviendas para beneficiar directamente a un miembro del Concejo Municipal. ¿Por qué? Pagando una deuda política.
Respetuosamente,
Concejal Modesto Maldonado
Lawrence, MA
