Conozca a Alexander Schwartz, un artista impresionante

Por Alberto Surís y la colaboración de Andrew Royce Fournier

El autismo es una condición generalizada de desarrollo neurológico que afecta la capacidad de una persona para comunicarse e interactuar con otros. Las personas con autismo pueden tener dificultades para entender las señales sociales y los comportamientos sociales “típicos”, y pueden enfrentarse a desafíos relacionados con quienes los rodean, ya sea mediante el uso de palabras o comportamientos no verbales. Afectando a 1 de cada 68 personas en los Estados Unidos, el autismo es una de las enfermedades neurológicas de más rápido crecimiento en el mundo. Aunque, debido al énfasis generalizado en la detección e intervención tempranas, la afección se asocia comúnmente con niños pequeños.

Sin adentrarme mucho en el tema, del cual reconozco no tener mucho o ningún conocimiento, sólo utilizo el párrafo anterior para introducir a Alexander Schwartz. Como persona autista, el arte le proporciona a Alex un gran sentido de logro, alegría y amor propio. Una o dos veces por semana durante dos o tres horas durante los últimos dos años, Alex se reúne con su profesor de arte, Andrew Royce Fournier. Juntos exploran la forma, el color y la composición utilizando medios mixtos. Cada pieza creada es una ligera variación de un tema de línea, color y forma. El viaje semanal de Alex no es planeado y cada una de sus creaciones es cruda y “en el momento”. Simplemente crea,” dice Andrew.

Alex sabe que cada pieza que crea es su diseño y está contento con el proceso. Dibuja sus formas, números y letras en capas y luego los colorea con paciencia y esmero. Su arte es superpuesto, intrincado e inesperado. Los colores brillantes y las formas geométricas y orgánicas crean movimiento y energía para el espectador. Los colores en capas explotan en la superficie del lienzo. El proceso de Alex y los trabajos completados atraen a los espectadores y los alientan a participar en su celebración. El espacio creativo de Alex es una gran variedad de marcadores, pinturas, lápices de colores, papeles, lienzos, cartones y los sonidos de la música.

Alex escucha todo tipo de música mientras crea. La música juega un papel muy importante en su expresión. En palabras de Wassily Kandinsky, “La música es el mejor maestro. Preste música a sus oídos, abra sus ojos a la pintura y… ¡deje de pensar! Solo pregúntese si el trabajo le ha permitido ‘caminar hacia un mundo hasta ahora desconocido. Si la respuesta es sí, ¿qué más quiere?

Alex se comunica con este colorido lenguaje abstracto. Es un colorista magistral y talentoso, no influenciado y refrescante. Utiliza los multimedios para expresar su amor. Como persona autista, el arte le proporciona a Alex un gran sentido de logro, alegría y amor propio.

Andrew Royce Fournier es graduado de la Escuela de Diseño de Rhode Island y residente de North Andover.

Alex tiene su primera exposición de pinturas en Lawrence Heritage State Park desde el 3 de febrero al 27.