El epítome de los insultos
¿Qué demonios? Estamos acostumbrados a ellos y todo el mundo lo sabe; es por eso que seguimos siendo tratados así. ¡Sin respeto!
He estado esperando pacientemente la decisión de la Jueza Kathleen McCarthy-Neyman sobre las dos medidas cautelares que Modesto Maldonado y yo presentamos el 14 de enero contra los concejales de la ciudad por no permitir una elección especial. Luego, durante el fin de semana, alguien me llamó para decirme que vio en la Internet publicado que fue denegado. No vale la pena mencionar quién lo publicó, obviamente alguien que tiene algo que ganar o disfruta viviendo en la tiranía.
Finalmente, alguien me envió el correo electrónico que contenía la decisión con la promesa de que no diría quién fue porque en la Ciudad de Lawrence los empleados viven con miedo y, por supuesto, acepté.
Sucedió que Tim Houten, abogado asistente de la ciudad, recibió la decisión de la jueza y la envió a todos los empleados de la ciudad con las instrucciones de publicarla en las redes sociales y enviarla a sus amigos. Modesto y yo nunca recibimos nuestra copia de la corte.
Eso significa que no tenemos ningún valor como litigantes, residentes, votantes o incluso seres humanos que merezcan la cortesía brindada a cualquier otra persona que pague por esos servicios. No importa; ¡no contamos!
Si se nos ha considerado menos que eso por pasar por el proceso de pedir que se respeten nuestros derechos, imagínense los que van ante un juez, aun siendo culpables de una infracción, sin dinero para su defensa, probablemente sin poder hablar el idioma con competencia, ¿cuáles son las posibilidades de un trato justo?
Atty. Houten dijo que una elección especial traería “un daño irreparable a la ciudad”. Mi respuesta fue, “¿qué pasa con el daño irreparable causado a los votantes?”
Estaba preparada para este resultado y ya me estaba moviendo en otra dirección, pero lo que me sorprendió fue esta flagrante indiferencia de ser ignorada por el tribunal al no recibir una copia de la decisión. Éramos los Demandantes pero el Demandado tenía prioridad.
Mirando el lado positivo de la decisión de la jueza McCarthy-Neyman, dejó muy en claro que Kendrys Vasquez es ALCALDE INTERINO. Será mejor que empiece a imprimir papel timbrado nuevo con ese título porque el título de alcalde es falso.
Servicios de alimentos LGH
A partir de la próxima semana, entrarán en vigencia algunos cambios en el Departamento de Servicios de Alimentos del Lawrence General Hospital.
Recibí varias llamadas de empleados que ahora se verán obligados a entregar comidas en las habitaciones individuales de los pacientes con COVID-19. El sistema hasta ahora era que dejaban las bandejas fuera del área y una de las enfermeras las traía.
Las enfermeras se han quejado de que desde que el Gobernador Baker declaró que debían atender a 4-5 pacientes durante su turno en lugar de 2-3 pacientes como antes, están demasiado ocupadas para distribuir las bandejas de comida.
Puede parecer lógico, pero no estamos hablando de una tarea adicional agregada a los trabajadores del servicio de alimentos. No han sido capacitados para trabajar con estos pacientes y será necesario cambiar el equipo de protección cada vez que ingresen a una habitación antes de pasar a la siguiente.
Son trabajadores a tiempo parcial con salario mínimo, en su mayoría jóvenes y estudiantes que necesitan un ingreso y sin duda temen enfermarse. Entiendo que algunos de ellos ya han renunciado.
No tengo la respuesta correcta, pero creo que el hospital debería encontrar una solución en lugar de poner en peligro a más personas.
Seguimos perdiendo gente buena
Me entristece decir que el director del DPW, Brian Peña, ha renunciado. Sigue los pasos de Carlos Jáquez que dejó la ciudad hace un tiempo. Estamos perdiendo a los mejores, más serios y honestos empleados y es una gran pérdida para todos nosotros.
Mucha suerte a Brian y Carlos.
Hablando de renuncias
Pero nos alegra ver que no todas son malas noticias. Dan Mackland Rivera, hermano de Dan Rivera. Cuando fue designado para trabajar en DPW, les dijo a todos que no planeaba hacer ningún trabajo. Pasó su tiempo haciendo recados para el alcalde y finalmente creó una empresa con Abel Vargas y Teodoro Rosario (dos alumnos de la alcaldía) para instalar aislamiento en el hogar. El negocio iba tan bien que Dan también renunció.
Ya no es necesario averiguando más qué hace como parte de su trabajo en el ayuntamiento: ¡NADA!
Cada vez que alguien va a preguntar por Teodoro Rosario, nunca está allí, está haciendo recados para el alcalde, etc. Las fotografías no mienten. Ahora sabemos que está trabajando en un negocio privado junto con sus ‘panas’.
Algunas personas llaman a esto “una botella”, pero la verdad es que es un robo a los contribuyentes. Un alcalde se ha ido y el siguiente ayuda a encubrir lo que está mal en la ciudad.
Solo otro Camarada
Históricamente, la Ciudad de Lawrence ha utilizado el Departamento Escolar como agencia de empleo. El Alcalde Rivera no fue el primero en abusar de ese poder que proporciona empleos a los familiares y amigos de los miembros del Programa de Amigos y Familiares.
La Lawrence Alliance for Education, la misma junta que se creó para usurpar la voluntad de las minorías en Lawrence, supuestamente ha elogiado a la Superintendente Paris.
El reconocimiento le fue otorgado por su trabajo del año pasado, excepto que los elogios realmente no fueron por ningún trabajo competente, sino por todas las personas que Paris ha colocado para trabajar en el sistema escolar público que pertenecen como familiares y amigos miembros de Lawrence. Alliance for Education.
Es necesario mejorar en áreas como la comunicación, la visión compartida y la gestión de conflictos, y aunque ella recibe su 2%, a otros empleados que necesitaban mejorar no se les permitió retener su aumento. Esto es evidente ya que los gerentes y directores de la oficina central son compinches, amigos, conocidos y, en general, las mismas personas que hacen caca en los demás para verse mejor. No son transparentes y quieren culpar a los demás por sus defectos; como supervisores, deberían rendir cuentas.
De lo contrario, antes de la pandemia (y continuó durante la pandemia), a los amigos y conocidos de la gerencia se les permitía faltar al trabajo, son remunerados sin razón, se les permitía ausentarse para asistir a la universidad mientras se les pagaba, y creaban empleos para personas que querían conseguir un trabajo cómodo en el gobierno. No hay responsabilidad de tiempo ni responsabilidad de su personal de mantenerse alejado del virus COVID-19 positivo, por lo tanto, pasan más tiempo no contabilizado mientras se les paga.
Esta es la razón por la que la Alianza debería ser entregada a los residentes de Lawrence como un comité escolar. Si bien la Alianza quiere “con suerte, el fin de esta pandemia está a la vista y… hacer que el distrito retroceda”. Esperamos que los representantes estatales y el senador estatal (que representa a Lawrence) puedan llevar al distrito de regreso a una junta escolar electa y dejar de poner la cabeza en el trasero para que parezca que no tienen voz en este tema.
Mientras tanto, los últimos puntajes del MCAS muestran que entre 27 y 28 clases de décimo (10) grado no cumplen con las expectativas en inglés o matemáticas en la comparación anual, mientras que 13 clases fallan en ciencias y 23 fallan en matemáticas.
Los padres de los estudiantes de las escuelas de Lawrence no sabrán cuán retrasados sus hijos están en la escuela porque el MCAS de primavera de 2020 fue cancelado.
Mientras tanto, esta Alianza y la superintendente no han hecho lo suficiente. Han pasado al menos 10 años desde la toma de posesión de las escuelas. Piénselo: 10 años y no se puede mostrar nada de esta adquisición, excepto un puñado de estudiantes destacados de secundaria que se graduaron.
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