Desde Mi Esquina: Enero 8, 2014

Fantástico fin de semana inaugural

            El acto público de la toma de posesión de Dan Rivera como Alcalde de Lawrence en el North Lawrence Education Complex (antigua escuela secundaria) era muy bonito.  El Programa de Cuerdas de la Comunidad hizo un trabajo hermoso.  Se trata de un grupo de estudiantes muy jóvenes tocando violín.

Los discursos fueron breves pero el de Danny fue particularmente significativo.  Él abordó los principales temas de preocupación en la ciudad, tales como la contratación de más agentes de policía y de asegurarse de que nuestros maestros tengan un contrato de trabajo.  Mientras que él criticó las acciones del Receptor/Superintendente Jeffrey Riley, también razonó sobre el deseo de obtener de nuevo el control de nuestras escuelas públicas.  El Alcalde Rivera dijo que de que vale adquirir el control de nuevo sólo por orgullo.  Nuestra preocupación debe ser primero asegurarnos que nuestros estudiantes tengan el tipo de educación que les ayude a sobresalir en la vida.

El patinaje sobre hielo en la tarde del domingo fue un auténtico lujo para las familias.  Les recomendé que pusieran vigilancia de 24 horas para proteger el hielo porque cuando Rumbo patrocinó una celebración First Night en 2001, el hielo fue arruinado la noche anterior por vándalos.

La Oración de la Unidad y de la Música en la noche del domingo en el Lawrence High School fue un gran éxito.  Fue un evento muy emotivo.  Danny prometió que vamos a tener otro en la primavera y esperamos que más iglesias y público puedan asistir.

¡Qué decepción!

Yo soy muy exigente con la calidad de los materiales impresos de carácter histórico porque las generaciones futuras nos mirarán según lo que dejamos atrás.  Me refiero al Programa del Fin de Semana Inaugural.

Le dije a Danny Rivera que si necesitaba algo traducido al español que por lo menos me dejara verlo para asegurarnos que no había errores.  Sé que esto no significa gran cosa para muchas personas que lo consideran trivial, pero estaba lleno de errores gramaticales y tipográficos.

Promesas rotas

“De ser elegido, ¿tomaría usted para su uso personal un auto de la policía a pesar de que la Constitución de la Ciudad no se lo permite?  “Esa fue mi pregunta a los candidatos durante el debate entre los candidatos a la alcaldía en Lawrence High School el pasado septiembre.  Los cuatro candidatos (Marcos Devers, Juan “Manny” Gonzalez, James O’Donoghue y Dan Rivera) respondieron en sentido negativo.

Dos días después de haber sido juramentado como alcalde de la Ciudad de Lawrence, Dan Rivera estaba inspeccionando su nuevo Ford Explorer, de color gris.  Hay que recordar que se trata de un seguro, gasolina, reparaciones, etc. pagados por la ciudad.

Por cierto, Marie Claire Kennedy tuvo un auto viejo de los que usaban los detectives.  Patricia Dowling lo mismo, pero más tarde fue mejorado por uno nuevo.  Michael Sullivan tuvo un par de coches nuevos en ocho años.  Sólo Lenny Degnan y Marcos Devers devolvieron las llaves durante el breve período en que fueron alcaldes interinos.  William Lantigua prometió que no iba a tomar un auto de la ciudad – y cumplió su promesa.

Envié un correo electrónico a todos los concejales de la ciudad con mi preocupación y hasta ahora sólo la Concejala del Distrito E, Eileen O’Connor Bernal y el Concejal del Distrito F, Marc Laplante respondieron.  Ambos se refirieron al uso del alcalde de un coche de la policía como “la práctica anterior” pero el señor Laplante dijo que fue comprado por el Departamento de Agua y Alcantarillado.  Espero que el concejo municipal averigüe esto porque de ser un Fondo Empresarial, sus excedentes no pueden ser usados por ningún otro departamento.

Y si hemos de regresar a la era de esas “prácticas”, vamos a traer de nuevo a Brian Cahoon tan pronto como termine de cumplir su sentencia.

Cuando lo comenté durante mi programa de radio el martes pasado, fui criticada por haber revelado la adquisición del auto tres días después de la inauguración, me dijeron que debería haberle dado unos cuantos días.

¿Por qué?  ¿Para ver si cambia de opinión y lo devuelve?  Ya lo adquirió.

Aunque sin relación, algunas personas que llamaron también se quejaron de los enormes letreros de Lantigua y que nunca me opuse a ellos.  Rumbo tiene constancia de habernos quejado de los letreros políticos remontándonos a la campaña de Patricia Dowling cuando la tienda de variedades en Water St., frente al Boys and Girls Club pintó todo el lateral del edificio con su nombre.  Más tarde, se cambió a Sullivan y finalmente, Lantigua.  Exigíamos que hicieran cumplir las leyes de la ciudad en cuanto al tamaño de los letreros políticos y nadie nos escuchó – y peor que eso, ahora nadie se acuerda del ruido que hicimos.

Ya vemos que no cumplió su palabra.  Recomiendo al Alcalde Rivera que se acostumbre rápidamente porque voy a seguir revelando lo que haga indebido y se lo merezca.

Lista de Policías

Antes de dejar el cargo, el Alcalde William Lantigua solicitó la lista de Servicio Civil con el fin de seleccionar a los nuevos policías que se sumarán a la fuerza de Lawrence.  Los fondos para que se puedan añadir llegaron el pasado mes de diciembre con un subsidio de $900,000.  Se espera que vayan a empezar a trabajar a finales de enero.

¡Que les sirva de lección!

La otra mitad de Rumbo, Alberto Surís, fue al Dunkin Donuts en Market St. hace unos días y pidió dos cafés, uno con leche y uno negro.  La dependienta detrás del mostrador le dio la orden a otra empleada y procedió a atender a un cliente en la ventanilla para autos.  La conversación tuvo lugar en inglés.

Cuando recibió el café con leche y le pidió el café negro, ella se volvió a la primera empleada preguntando, en español, si ella le había mencionado un café negro.  Esa “señora”, respondió con un lenguaje muy vulgar, no una, sino varias veces.  Entonces, Alberto preguntó a algunos clientes en español, “¿Me oyeron pedir un café negro?”

Los clientes asintieron riendo y las empleadas se quedaron en estado de shock, ya que no esperaban que fuera un latino.  Por supuesto, Alberto no se fue sin castigarlas por usar vulgaridad en un lugar público.  El hecho de que lo usan en programas de radio y televisión, no es excusa para faltarle el respeto a los clientes.