En nuestra anterior edición, hicimos un amplio reportaje sobre House of Mercy y el maravilloso servicio que están dando a personas sin hogar, los cuales pasaban el día en establecimientos que les permitían estar por algún tiempo, solo para entrar en calor.
Destacamos como Roger Farah había venido en su rescate, poniendo sus propios recursos, proporcionándoles no solo un sitio donde pasar el día, además de ofrecerles desayuno y almuerzo, la oportunidad de darse un baño, lavar y secar su ropa, todo esto sin costo alguno.
Aún maravillados con el trabajo de Farah y sus voluntarios, nos llega la noticia de lo que, no a mucha distancia, está haciendo la Dra.Terika Smith y su Ministerio.
Comenzó con el destrozo total que causara el Huracán María, el huracán más poderoso que ha golpeado a Puerto Rico en más de 80 años, que destruyó cientos de hogares y dejó sin electricidad a toda la isla y la masiva participación popular que envolvió a Lawrence por semanas.
Las donaciones venían de todas partes, tantas que ya no cabían en los espacios cedidos por el Ing. Rafael Guzmán en su edificio del 530 de Broadway, que tuvieron que ser trasladadas a los almacenes de la Guardia Nacional en Worcester.
Ya en Puerto Rico, las donaciones comenzaron a llegar, y para asegurarse que la distribución se estaba llevando a cabo lo más rápidamente y organizada posible, allá fue Terika Smith, que trabajando con los líderes de las distintas iglesias locales lograron el objetivo.
De regreso a Lawrence, la Dra. Smith se encontró con otro reto. Puertorriqueños que lo habían perdido todo, decidieron venir para tierra firme, en este caso y siendo ciudadanos de este país, muchos vinieron a radicarse en Lawrence creando con ello otras necesidades tales como vivienda, escuelas y ropa apropiada para el clima al cual no estaban acostumbrados.
No tardó en habilitar oficinas donde dan consejería emocional a los recién llegados, además de orientación en cuanto a conseguir trabajo y una despensa con alimentos y una sección de ropa tanto para hombres como para mujeres y niños, y para estos últimos, creó una Boutique, La Esquina de la Esperanza, que no tiene nada que envidiar a la de ninguna tienda famosa.
Lawrence es dichosa en tener personas como Roger Farah y la Dra.Terika Smith. Aquellos en necesidad de los servicios que ellos ofrecen, deben dar gracias al Creador por haberlos puesto en su camino.