Todavía la concejala privilegiada no ha pagado Por Dalia Díaz

Estela Reyes no ha hecho un pago en el permiso de construcción en su casa del 173-175 Haverhill St.

Sé que la Concejala Estela Reyes no tiene vergüenza y no se apena por esto, pero me pregunto por qué nunca le impusieron un guardia de incendios como hicieron con las hermanas Tomaselli a una cuadra de distancia.  Me pregunto cuántas personas más aparte de Estela están haciendo lo mismo.

Los Servicios de Inspección tampoco le dieron una orden de suspensión del trabajo por falta de pago.  ¿Ve por qué dije que esto es “privilegio”? Compare esto con la casa que James O’Donoghue estaba construyendo pagando los permisos y todos los requisitos.

Esta ciudad funciona sin vergüenza y ninguno de los concejales muestra respeto por los vecinos; no importa lo que yo escriba, ellos se mantienen silentes. El problema es que no tenemos líderes en Lawrence que nos representen. Algunas personas dicen que todos deben ser reemplazados, pero ¿con quién? Solo me temo que cualquiera que elijamos podría terminar siendo peor.

Se están escondiendo del público al celebrar sus reuniones casi en secreto porque no todos tienen acceso al Internet para ver las espantosas transmisiones de zoom. Otras ciudades y pueblos los han estado viendo por televisión manteniendo la distancia adecuada y con paneles acrílicos que los separan.

No deberían temer al público porque solo Richard Russell y probablemente uno o dos residentes más asistirían a las reuniones de la Cámara. A esta comunidad no le importa lo que pase como para quejarse.  ¡Ahora sí que estamos condenados!

 

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